Vamos a remediar, por partes, lo que se pueda:
Con ésta ilustramos el proceso de talla de una costilla. Hemos aprovechado para la foto una pieza que sobró, una muestra de dislexia, una a punto de redondear cantos y una terminada a falta de aceite. Por cierto, estupendo abeto.
Si se repite el proceso veinte veces se obtiene esto:
Visto de otra forma:
Aquí están ordenadas emparejando la ranura del larguero de bancos, el interior. Se puede observar que varían las longitudes en ambos extremos de cada costilla, en una medida que no se puede predecir fácilmente. Lo mejor es presentarlas todas en bruto habiendo hecho el encaje superior y el inferior (con sus ángulos variables marcados con el sistema de galgas de cartulina), marcar el encaje, desmontarlas para tallar el encaje y las formas, volver a montar, marcar el encaje del stringer exterior, montarlas para encajar ambos largueros y marcar encajes en roda y codaste...
Un momento del proceso, con las costillas y otras piezas "en bruto"
montar-desmontar, montar-desmontar, he aquí nuestro nuevo mantra.
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