Por el suelo, entre un caos razonable, con un barco a medio hacer, sentado sobre un pie y bloqueando un listón con la rodilla, el lápiz en la oreja, dándole al formón y, de fondo, "Lágrimas Negras": así he pasado muchos sábados estos últimos años.
Espero que cuando me jubile pueda todavía sentarme sobre un pie y acostarme con la sensación de llevar todavía el lápiz en la oreja... vivir cada día como si fuera un sábado.
sábado, 17 de enero de 2009
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2 comentarios:
Miro un momento para otro lado... y a la que vuelvo me encuentro todo esto
Da gusto veros avanzar. Ahora, eso sí, ya no me atreveré a quitaros ojo...
Tenemos arrancadas de caballo y paradas de burro. De todas maneras, nos proponemos ser más constantes, más que nada porque el tiempo apremia y las cosas no siempre salen bien a la primera.
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